PRODUCTOS MONÁSTICOS

 

Han de ocuparse los hermanos a unas horas determinadas en el trabajo manual (…) son verdaderos monjes cuando viven del trabajo de sus propias manos.                                                                                                                                                       (Regla de San Benito, XLVIII)

Si el trabajo, y en concreto el trabajo manual, es uno de los pilares de la vida del monje cisterciense, también es cierto que el fruto de su trabajo es importante para la autonomía económica de la comunidad. En las últimas décadas, los cambios profundos en el mundo del trabajo y la creciente monopolización de los circuitos comerciales, donde el trabajo artesanal y la pequeña producción son frecuentemente minusvalorados, constituyen un reto importante para que las comunidades monásticas sean un signo profético del valor del trabajo humano sin rendirse ante la absolutización del lucro.

Los monasterios cistercienses de España prepararon un catálogo con los varios productos de sus comunidades. Son fruto del trabajo cotidiano de monjes y monjas, que, junto con el oficio divino y la lectio divina, les proporciona un estilo de vida equilibrado, y que contribuye para mantener económicamente las comunidades.